Smoothie calentito de fresas y cacao: la bebida reconfortante que necesitas este otoño
Cuando el otoño llega y las temperaturas bajan, nada reconforta más que una bebida caliente que combine sabor, salud y un toque de dulzura natural. Nuestro Smoothie calentito de fresas y cacao es la fusión perfecta para quienes buscan mimarse con un capricho saludable sin renunciar al placer.
Las fresas frescas de Cuna de Platero, cultivadas con el máximo cuidado y respeto por la tierra, aportan un aroma y dulzura incomparables, mientras que el cacao puro nos envuelve con su intensidad y propiedades antioxidantes. Juntos, forman una bebida rica en vitamina C, antioxidantes y energía natural, ideal para recargar pilas en los días fríos.
Además, su preparación es rápida y sencilla, perfecta para disfrutar en el desayuno, como merienda o en cualquier momento en el que necesites una dosis extra de calidez y bienestar. Solo necesitas unos pocos ingredientes naturales y en cuestión de minutos tendrás una taza lista para reconfortarte desde el primer sorbo.
Ingredientes
200 g de fresas frescas de Cuna de Platero
250 ml de leche
2 cucharadas de cacao puro en polvo
1-2 cucharadas de miel o sirope de agave
1 pizca de canela
Paso a paso para el smoothie caliente de fresas y cacao
Paso 1: prepara los ingredientes
Antes de comenzar, reúne todos los ingredientes para tenerlos a mano y agilizar el proceso. Lava cuidadosamente las fresas frescas de Cuna de Platero, retira el rabito verde y córtalas en trozos pequeños para facilitar su licuado. Si las fresas están muy frías de la nevera, déjalas a temperatura ambiente unos minutos para potenciar su sabor.
En un bol pequeño o taza, mezcla el cacao puro en polvo con la canela si vas a utilizarla. Esto ayudará a integrar mejor los sabores en la mezcla caliente y evitará grumos. Si usas miel o sirope, tenlo también preparado para añadirlo en el momento adecuado.
Paso 2: trocea y licúa las fresas
Coloca las fresas troceadas en el vaso de la batidora junto con la mitad de la leche que vayas a utilizar. Tritura a velocidad alta hasta obtener una mezcla suave y sin trozos. Si lo prefieres más fino, puedes pasar el batido por un colador para retirar las semillas.
Este paso es clave para que el smoothie tenga una textura cremosa y agradable. Cuanto más homogénea sea la mezcla, más fácil será integrarla con el cacao caliente después.
Paso 3: prepara el cacao caliente
En un cazo pequeño, calienta la leche restante a fuego medio sin que llegue a hervir. Añade el cacao en polvo poco a poco mientras remueves con unas varillas para disolverlo por completo. Mantén la mezcla en movimiento para que no se formen grumos y el cacao se integre bien.
Cuando la mezcla esté caliente y homogénea, incorpora la miel o sirope si lo deseas. Esto no solo endulzará el smoothie, sino que también aportará un matiz aromático perfecto para los días fríos.
Paso 4: mezcla y sirve
Vierte el licuado de fresas en el cazo con el cacao caliente y remueve bien para integrar todos los sabores. Calienta un par de minutos más a fuego suave para que la mezcla esté bien caliente sin que llegue a hervir.
Sirve en tu taza favorita, espolvorea un poco de cacao o canela por encima y disfruta al momento. Este smoothie calentito es perfecto para acompañar tus desayunos o darte un capricho saludable en las tardes de otoño.
Consejos útiles
Trucos de cocina
Añade un chorrito de esencia de vainilla al cacao caliente para un aroma más dulce y envolvente.
Sustituye parte de la leche por bebida de coco para un toque tropical que combina muy bien con las fresas.
Para una textura más cremosa, incorpora una cucharada de yogur griego justo antes de servir y mezcla suavemente.
Decora con virutas de chocolate negro por encima para un acabado vistoso y un extra de intensidad en el sabor.
Si quieres un toque especiado, añade una pizca de jengibre en polvo al cacao mientras se calienta.
Preguntas frecuentes
¿Puedo preparar el smoothie con fresas congeladas?
Sí. Solo tienes que descongelarlas previamente para que no enfríen demasiado la bebida y el resultado siga siendo calentito. Además, es recomendable escurrir el exceso de líquido antes de licuarlas para mantener la cremosidad.
¿Qué leche es la mejor para esta receta?
Puedes usar la que prefieras: entera, semidesnatada o vegetal (avena, almendra, coco…). Las leches vegetales aportan matices de sabor diferentes, mientras que la leche entera dará más cuerpo y cremosidad al smoothie.
¿Se puede preparar sin endulzante?
Sí. No es necesario añadir miel o sirope. También puedes sustituir el endulzante por dátiles triturados o stevia natural para una opción más ligera.
Conclusión
Disfrutar de un Smoothie calentito de fresas y cacao es regalarte un momento de confort y sabor en cualquier día frío de otoño o invierno. Su combinación de fresas frescas y cacao puro no solo es deliciosa, sino que también aporta antioxidantes, vitaminas y energía de forma natural. Además, su aroma y textura cremosa lo convierten en una bebida perfecta para compartir o para disfrutar a solas mientras lees, trabajas o te relajas.
Es una receta muy rápida y fácil, ideal incluso para quienes tienen poco tiempo pero no quieren renunciar a un capricho saludable. Tiempo de preparación: 10 minutos. No requiere técnicas complicadas ni utensilios especiales, y puedes adaptarla fácilmente a tu gusto con las variantes que hemos propuesto en los trucos de cocina.
Tiempo de preparación: 10 min.
Raciones: 2 personas
